Con el filo del olvido


Con el filo del olvido
Andrés Díaz Marrero

Con el filo del olvido
me destrozaste el pecho,
pecho que ya no era mío
que era tuyo, todo entero.
Fueron catorce puñales
que catorce tajos dieron
ninguno fue en el costado
todos en el alma fueron.
Un sinsonte de esperanzas
con dolor y sentimiento
batió con tristeza el ala,
al sentir el frío acero.
El corazón del sinsonte
que siempre cuidó tu vuelo
lanza sus notas al aire
como cenizas al viento.
Y aún con las catorce heridas
que han consumido su aliento
sigue cantando a la vida,
¡bendiciendo tu recuerdo!




©Andrés Díaz Marrero
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